Una inversión específica cuyas características fueron definidas de manera inicial puede requerir de modificaciones o cambios en cualquiera de sus rasgos distintivos, aspecto que puede demandar la reconducción o redireccionamiento de recursos económicos dentro de la misma inversión, permitiendo así, evolucionar lo que sea necesario en función a los cambios de por ejemplo cantidades, precios o peculiaridades, sin que esto involucre modificaciones al monto inicial de la inversión